¿Qué es la policía de la alimentación?

“La policía de la alimentación” es esa voz en nuestra cabeza que nos recuerda todas las reglas que le hemos puesto a nuestra alimentación. Son esas voces negativas y que generan culpa, en lugar de ver la alimentación como un acto placentero. Por lo tanto, desafiar “la policía de la alimentación” es principio muy importante para poder alimentarnos de manera intuitiva.

Pensamientos de la “Policía de la Alimentación”:

  • “Hoy fue buena persona por comer ensalada” u “hoy me porté mal por comer postre.” 

  • “No debería comer después de las 6pm”

  • “Debería comer libre de grasa”

  • “Debería evitar los carbohidratos”

  • “X alimento me engorda”

A muchas personas les genera el mismo sentimiento de culpa de robar o mentir, cuando se comen un postre o unas papas fritas. El primer mordisco hace que se sientan un “fracaso” o que son “malas personas”. Comer un alimento “malo” o “prohibido” se vuelve un problema moral. 


La Policía Alimentaria describe la comida en términos de moral:

  • Pecar

  • Tentador

  • Culposo

  • etc.

Lo vemos diariamente en la televisión, anuncios, redes sociales, etc. Por ejemplo:

  • “Galletas light, todo lo delicioso menos la culpa” 

  • “Menos culpa, más placer”

  • “No peques con estos 5 alimentos” 

Con todos estos mensajes alrededor se hace dificil ver la experiencia de comer como placer. Se vuelve una experiencia “buena” o “mala” y la policía alimentaria está siempre ahí haciéndonos sentir mal en cada bocado. Estos pensamientos están impregnados en muchas personas. Estos pensamientos son distorsiones cognitivas y lo llamamos “la policía de la alimentación.”

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