¿Cómo cambiar las voces negativos a pensamientos positivos en nuestra alimentación?

Muchos de nosotros tenemos esas voces negativas en nuestra cabeza que influencian nuestras decisiones de alimentos y cómo nos sentimos. En este blog te enseño cómo cambiar esas voces negativas a pensamientos positivos para que sean un aliado en nuestro diario vivir, en lugar de un constante estrés.

En el libro de Evelyn Tribole y Elyse Resch, las autoras del libro de Alimentación Intuitiva, decriben las diferentes voces negativas y positivas que normalmente pasan por nuestra mente.

Las 3 voces destructivas comunes : 

  1. Policia de la alimentación 

  2. El informante de nutrición

  3. El rebelde de las dietas

Las 3 voces positivas comunes:

  1. Antropólogo de la comida

  2. El criador 

  3. Aliado nutricional

¿Cómo cambiamos las voces negativas a pensamientos positivos?

  1. Policía de la alimentación

    La policía de la alimentación es esa voz negativa en nuestra cabeza que juzga nuestras decisiones de alimentos, determina si te ha ido bien “bien” o “mal”. Es la suma de todas las reglas alrededor de la comida que son cada vez más rígidas. Por ejemplo “no comer de noche”, “no puedo cenar si no hice ejercicio”. “todavía no es hora del snack, no podés comer”

    ¿Cómo nos afecta ?

    Crea estrés en las decisiones de comida. Te mantiene a vos, tu cuerpo en la comida en guerra constante.

    ¿Cómo cambiamos esta voz negativa a un pensamiento positivo?

    Primero podemos identificar esa voz en nuestra cabeza, aprender cómo reducir el impacto que tiene en nosotros. 

    Podemos empezar a utilizar al antropólogo de la comida, es un observador neutro que no juzga, es la voz positiva que nos deja explorar y descubrir. Nos ayuda a notar cuando tenemos hambre o estamos satisfechos, notar nuestras decisiones de alimentos sin juzgar, notar el ambiente en el que estamos y nuestros pensamientos.

    Por ejemplo:

    • Notás que te saltaste el desayuno y a las 11am te querías comer el mundo.

    • Me comí 10 galletas (sin juzgar, solo notar)

    • Me sentí culpable después de comer postre (solo observación de cómo te sentiste) 

    Una manera de reconocer el antropólogo de la comida es tener un diario de comida. Escribir la hora en que comiste, qué comiste, cómo te sentías. Escribir tus sentimientos antes y después de comer. Te puede dar pistas interesantes de las razones por las que comés, es una herramienta para explorar y descubrir, no para juzgar.

También, podemos empezar a cambiar las voces negativas por las voces “el criador” que son positivas, compasivas y gentiles. Es la voz que nos dice que todo va a salir bien, te ayuda a ser compasivo cuando aparece la policía de los alimentos. Por ejemplo: “está bien comer galletas, es normal”, “comí hasta sentirme incómodamente llena, ¿qué estaba sintiendo?”, “cuando me cuido, ¡me siento súper bien!”.

2. El informante de nutrición

El informante de nutrición es la voz conflictiva que que provee recomendaciones nutricionales solamente para mantenerte a dieta. Por ejemplo, te dice “chequea los macros, cualquier desviación es inaceptable!”, “prohibido comer chocolate.”

¿Cómo nos afecta?

Dice que es “salud” pero es basada en privación y prohibición.

¿Cómo cambiamos esta voz negativa a un pensamiento positivo?

El informante de nutrición se convierte en el aliado nutricional. El aliado nutricional le interesa comer saludable pero sin tanta rigidez. Es una voz positiva que escoge alimentos basados en salud y satisfacción, no en privación y dieta. 

El rebelde de las dietas

El rebelde de las dietas es una voz enojada y determinada. Es nuestra manera de revelarnos ante los mensajes de privación alrededor, en orden de proteger nuestra autonomía nos rebelamos con la comida para mantener nuestra independencia. Por ejemplo “¡voy a comer todavía más, porque me están diciendo que coma menos!”, “¡vamos a ver cuántos chips me puedo comer antes de que me vean!” o “no puedo esperar a llegar a mi casa para comer lo que me de la gana.”

¿Cómo nos afecta?

Es un comportamiento rebelde y auto-destructivo que no tiene límites y resulta en comer de manera impulsiva. 

¿Cómo cambiamos esta voz negativa a un pensamiento positivo?

El rebelde de las dietas se puede convertir en el rebelde aliado. Tu cuerpo, tus reglas. El rebelde aliado te ayudará a proteger tus límites ante cualquiera que trate de invadir tu espacio de alimentación o tu cuerpo. Te ayudará a establecer límites con las personas alrededor, en lugar de rebelarte por medio de la comida. Por ejemplo:

  • Decirle a tus amigos o familiares que no comenten en tus decisiones de comida o cantidad. 

  • Decirle a tus amigos o familiares que no comenten tu cuerpo. Tu cuerpo, tus reglas. 




El que come de manera intuitiva

Una persona que come de manera intuitiva responde a su intuición. La persona intuitiva es una combinación del antropólogo de la comida, quien puede observar su manera de comer, el criador quien le recuerda la normalidad, el aliado rebelde que le ayuda a establecer límites y el aliado de nutrición que se encarga de cuidar de su salud y satisfacción. Las dietas son rígidas, la alimentación intuitiva es fluida y se adapta a muchos aspectos de tu vida.  

  • Por ejemplo:

    • Están sonando mis tripas, tengo hambre y quiero comer. 

    • Escoge la comida que le va a satisfacer

    • Se siente bien no prohibir alimentos.


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