La clave para parar de comer cuando estás satisfecho
Aprender a escuchar y respetar la saciedad para comer justo lo necesario, ni más ni menos. Para honrar tu saciedad es importante confiar en que los alimentos que querás van a estar disponibles. Hacer pausas en las comidas y notar las señales de nuestro cuerpo que nos dicen que estamos cómodamente llenos, nos ayudará a parar cuando estamos satisfechos.
Varios factores pueden afectar cómo respondemos a la saciedad:
Nos enseñaron a “limpiar el plato”
Respetar la economía y el valor de la comida - no desperdiciar
Hábito de comer hasta que se acabe todo
Desórdenes alimenticios
Empezar a comer cuando tenemos demasiada hambre
Inseguridad alimentaria
Lo que pasa cuando tratamos de engañar al cuerpo que estamos satisfechos
Somos expertos en tratar de llenar nuestro estómago con alimentos sin calorías para engañar al cuerpo que estamos llenos, como rice cakes o bebida carbonatada. Sin embargo, si estás tratando de ganarle al hambre, lo vas a poder hacer por un rato pero eventualmente tu cuerpo no está recibiendo la energía que necesita y vas a tener demasiada hambre. Si tenés hambre, ¡come!
Reconocer cuando llegaste a un nivel cómodo de saciedad
Muchas personas ya no saben cómo se siente un nivel cómodo de saciedad. Cuando estás tratando de respetar tu saciedad es difícil hacerlo si no lo estás buscando. Más que todo cuando te han enseñado a limpiar el plato o si empezás a comer cuando no tenés hambre. Es dificil parar porque te sentís satisfecho. La sensación es muy individual, es algo que tiene que ser experimentado a nivel personal. Así aprendés cómo se siente, en tu propio cuerpo:
Tratá de imaginarte cómo se siente el nivel cómodo de saciedad:
Tu estómago está contento
Te sentís satisfecho
Sentís una llenura agradable
Compará esa sensación a cuando llegás a un nivel incómodo de llenura, ¿cómo se siente tu cuerpo?
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¿Cómo respetar la saciedad?
Solamente si te das permiso de comer otra vez cuando tenés hambre y tener acceso a la comida, vas a poder respetar la saciedad de manera más fácil. Respetar la saciedad o tener la habilidad de parar de comer cuando ya comiste suficiente, se apoya en darte permiso incondicional de comer lo que querás, sino cómo podrías respetar la saciedad si sentís que no vas a poder tener esa comida o alimento otra vez? Es importante recalcar que la alimentación intuitiva es un privilegio que no puede estar en las personas con inseguridad alimentaria.
Si tenés el hábito de limpiar el plato, ya lo tenés en automático. Para romper este patrón es importante que estés consciente y atento de tu manera de alimentarte. Practicar Mindful Eating.
Muchas veces estamos conscientes de que estamos comiendo pero no estamos conscientes en al acto de comer, en los sabores, texturas y conexión con nuestro cuerpo.
“No me di cuenta que estaba comiendo tantos chips hasta que se acabó la bolsa”
“Muchas veces ni saboreo lo que me comí y ya no hay más”
Factores de la saciedad:
La cantidad de tiempo que ha pasado desde que comiste
El tipo de comida
Carbohidrato, grasas y proteína, fibra
La cantidad de comida que tenías en tu estómago cuando empezaste a comer, de la comida o merienda pasada.
Nivel de hambre inicial
Si empezás a comer con demasiada hambre, es más probable comer de más.
Influencia social
Comer con otras personas puede influencias la cantidad que comés
¿Qué pasa si no puedo parar de comer?
Si te das cuenta que ya pasaste tu nivel cómodo de saciedad pero seguís comiendo, es posible que estés usando la comida para lidiar con otros aspectos de tu vida o tenés historial de inseguridad alimentaria.
Referencias
Tribole, Evelyn . Intuitive Eating, 4th Edition (p. 90). St. Martin's Publishing Group.